Pero hay que ser precavidos a la hora de exponernos al calor y la radiación del verano. Ir a la playa o a la piscina es genial y a todo el mundo nos encanta, pero debemos tener cuidado con nuestra piel. Esta más que dicho y repetido, sobretodo por parte de nuestras madres, pero no queremos sustos innecesarios, así que aquí van algunos consejillos útiles:
- Échate crema, de protección media-alta, aunque no te hayas quemado nunca es muy importante la protección solar, no solo para protegernos de las quemaduras sino por poner una capa intermediaria entre los rayos ultravioletas y las radiaciones agresivas y nuestra piel a fin de evitar exposiciones que puedan conllevar cáncer o otros problemas.
- Es recomendable no tomar el sol en las horas que el sol está llegando a su cenit y la exposición es mayor. Estas horas serían desde las 12 del medio día hasta las 3 de la tarde más o menos. Busca una sombra o pon una sombrilla.
- Bebe mucha agua, con temperaturas tan altas como las del verano el riesgo de deshidratación es mayor.
- Utiliza sombreros, viseras o algo para cubrirte la cabeza para evitar insolaciones.
- Si tienes pensado estar muchas horas en la playa o piscina, alterna el tomar el sol con algún chapuzón, es bueno refrescarse.
- Como esta más que dicho después de comer espera de 2-3 horas para meterte al agua.
- Y sobretodo, disfruta.
Pasad todos/as un muy buen verano y nos vemos pronto con otra entrada. Un beso enorme :)